EsDeRaíz es un oasis de productos frescos y naturales en el bullicioso mercado municipal de Santa María de la Cabeza en Madrid.

Pedro, el propietario, ha cultivado un negocio que va más allá de la simple transacción comercial, ofreciendo a sus clientes no solo alimentos saludables, sino también conocimientos sobre agricultura sostenible y prácticas responsables.

Con una combinación de tienda física y plataforma en línea, EsDeRaíz se ha convertido en un referente para aquellos que buscan una experiencia de compra consciente y nutritiva.

¿Qué te inspiró a abrir EsDeRaíz y cómo ha sido la transición de operar exclusivamente en línea a tener también una presencia física en el mercado municipal?

Bueno, soy Ingeniero agricola de formación y después de la crisis de 2008 me plantee hacer algo relacionado con mi formación, (en aquel momento trabajaba en otro sector). Me encanta la gastronomía y pensé que un comercio como EsDeRaíz podría ser una buena idea. Empezamos seleccionando una docena de productores de todo el país y lanzamos un catálogo online, pero nos dimos cuenta que la gente quiere ver lo que come y, al poco tiempo, abrimos la tienda física. Pensamos que abrirla en un mercado reforzaba nuestra idea de cercanía y de compra consciente.

¿Cómo seleccionas los proveedores y qué criterios utilizas para garantizar que los productos que ofreces cumplan con tus estándares de calidad?

En esa selección inicial establecimos una serie de criterios relacionados con la sostenibilidad. Además de cultivo o crianza en ecológico, buscamos la máxima calidad y proyectos con un valor social interesante. Calidad, impacto social y ambiental, esas son las tres patas de nuestra tienda. A partir de ahí hermanos ido completando el catálogo. Algunos productos no tenemos más remedio que comprarlos en distribución pero procuramos buscar proveedores con estas características.

La inclusión de una huerta propia es un gran paso. ¿Cómo ha sido esta experiencia y qué beneficios has observado al tener tu propia fuente de productos frescos?

Esta nueva fase ha coincidido con una apuesta personal y familiar de mudarnos de una gran ciudad como Madrid a un pequeño pueblo. Necesitábamos tener contacto con la tierra y la naturaleza y buscamos una casa con terreno donde establecer huerta y frutales. Encontramos el sitio perfecto en la cara sur de Gredos y para allí nos fuimos.

He de decir que cultivar es, sin duda, una actividad recomendable y fantástica. Todos los dias se aprende algo y el tiempo en el campo pasa volando. No lo cambiaría por nada. Además, la clientela ha acogido la iniciativa con entusiasmo y nuestros productos son muy solicitados.

Además de la fruta y la verdura, ofreces una amplia gama de productos, desde lácteos hasta vinos. ¿Cómo seleccionas estos productos complementarios?

Aunque nuestro fuerte es la fruta y la verdura intentamos complementar la oferta con algún producto más entre conservas, granel (legumbres, pasta, arroz y frutos secos), lácteos y huevos y alguna cosa más. Lo de los vinos se debe a que soy muy aficionado a ellos y los tengo en la tienda casi por eso.

Todos los proveedores son seleccionados en base a los tres pilares que definía anteriormente. La verdad es que, después de tanto tiempo, muchos productores vienen a nosotros a ofrecernos sus productos.

Tener una presencia en línea es crucial en la actualidad. ¿Cómo ha sido tu experiencia en línea?

Bueno, he de decir que la venta online es muy complicada. Para, realmente, tener un impacto la inversión tiene que ser alta y constante. Además, mantener una tienda online de productos que cambian los precios casi semanalmente requiere mucho trabajo. En cualquier caso, a nosotros nos sirve de escaparate. Mucha clientela contacta con nosotros gracias a la web.

¿Cuál es tu visión para el futuro de EsDeRaíz?

Seguir siendo un proyecto viable. Esta tienda es un buen lugar para trabajar y queremos seguir así mucho tiempo, conciliando con nuestra vida personal y, a la vez, dando un buen servicio.

Para aquellos que están interesados en llevar un estilo de vida más saludable y sostenible, ¿qué consejos les darías para comenzar su viaje hacia una alimentación más consciente?

Muchas veces la gente intenta cambiar sus hábitos de manera radical, y eso no suele funcionar. Yo animaría a la gente a ir incorporando a su cesta de la compra, productos saludales y sostenibles, más allá de los que nos ofrece la distribución convencional. Hay mucha oferta de productos por descubrir. La alimentación debería ser una de nuestras prioridades, ya que influye directamente en nuestra salud. Asimismo, apostar por estos productos es un acto casi revolucionario, es la mejor manera de contribuir a mejorar nuestro entorno.